Diario de escritora: La merienda

Consigna: Para el DIARIO de escritores: elegir una actividad cotidiana, que hagan todos los días, por ejemplo, preparar el mate. Describirla con el mayor detalle posible, cada día.
Las meriendas
Hay ciertas cosas que uno hace cotidianamente en las cuales no está completamente presente. Una de las más notorias para mi es cualquier momento en el cual allá comida. Presto más atención a lo que está pasando alrededor que en comer, y lo que estoy comiendo. Para realizar este trabajo decidí focalizarme en la merienda. Fui criada en una familia que le gusta tener los momentos de comida todos juntos, no es por necesidad de vernos, pero es algo que tenemos internalizado.  

20/05/20
Hoy mi merienda fue tardía. Eso no fue lo único que cambio de mi rutina. Con todas las consignas que se tienen que hacer por temas de la facultad, mis tardes consisten de mucho estudio. El tiempo después de almorzar es tiempo que dedico a la lectura de textos. En ese sentido no fue nada distinto. Lo que cambio es que me tome más tiempo que otros días y no termine yendo a la cocina hasta eso de las 6:00.  
Como ya mencioné, a mi familia le gusta tomar la merienda todos juntos, pero hoy nos estábamos sintiendo bastante abrumados después de tantos días juntos, así que decidimos estar más separados. No fue algo que dijimos y asentamos, pero es algo que terminamos haciendo de todas maneras.  
Estaba antojada de unas tostadas con queso crema y azúcar. También decidí hacerme un té verde, como de costumbre, pero al ir a la heladera para buscar queso crema me di cuenta de que mi mamá había comprado yogurt firme. No soy una persona que ame el yogurt, pero de vez en cuando, si se me da la opción, no me opongo. Deje de lado las tostadas y agarre un yogurt con cereales. 
El momento en el cual finalmente me senté a comer fue el más lindo. Estaba sola, o lo más sola que uno puede estar en una cuarentena obligatoria en la cual no se puede salir, especialmente cuando vivís con 4 personas. Mientras mezclaba los cereales en el yogurt con una mano, agarré el control con la otra y elegí que mirar en la televisión. Al vivir con otras personas es muy difícil encontrar un momento en el cual se pueda elegir un programa para mirar y que todos estén contentos con la elección. Estaba muy tranquila, mirando "La casa de papel" cuando me acorde que más tarde tenía una videollamada con mi tía por su cumpleaños, debido a eso apenas termine fui en busca de mi computadora y mis hermanos. 

21/05/20
A diferencia del día anterior, no quería mirar la misma serie. Estaba con ganas de reírme. Entonces hice lo único sensato que haría cualquier persona, puse Comedy Central en Youtube.  
Fue una merienda corta. Considerando que mi mama no estaba porque se había ido a lo de mis abuelos para darle cosas del supermercado, y mis hermanos nunca vinieron. Por lo que me senté en la mesa sola y merendé sola. La única compañía que podía llegar a tener era de mi perra, que nunca está lejos si vas a la cocina. Pero ni siquiera ella estaba ahí.  
Al igual que ayer hoy también fui tarde a merendar. Esta vez fue simplemente porque me quede distraída con el celular y las redes sociales. No me di cuenta de que el tiempo estaba corriendo y para cuando me puse a prestar atención ya eran las 6:30. 
No hay mucho para agregar acerca de esta merienda, fue corta y sin acontecimientos notables. 

22/05/20
Antes del horario del té suponía que iba a comer algo rico. Podía escuchar el ruido de la cuchara de madera golpeando con el bol. Mi hermana, Martu, estaba cocinando algo que, basándome en el olor, parecía ser pan. En estos momentos difíciles algo que nos mejora el ánimo en esta familia es, cocinar y comer rico.   
Como todas las veces, mi familia se reunió en la cocina un poco después de las 5:00. Como yo había supuesto, mi hermana menor estaba cocinando un pan. Pero lamentablemente no iba a estar hecho hasta dentro de un rato, asique quedo para la noche. 
Fui directo a la heladera en busca del té que me había hecho a la mañana, pero no había llegado a terminar, lo metí en el microondas y lo calenté por unos minutos. Cuando termino me dirigí a la mesa, y me senté en el mismo lugar que me siento siempre.  
La tele estaba prendida en un canal x y nadie estaba prestando mucha atención, era para que haya ruido de fondo. Hablamos de varias cosas, pero la que más me quedo fue la de recomendaciones de series para mi abuela. Discutimos acerca de qué serie podía ser apropiada para mi abuela y cual no. Terminamos decidiendo que la mayoría de las series que nosotros vemos y nos resultan interesantes a ella también, ya que le gustan las cosas que están a la moda actualmente.  
Fue una merienda bastante ruidosa y larga, lo cual no es fuera de lo habitual. Mi familia es muy ruidosa por lo que normalmente hay mucho ruido que retumba en las paredes. Honestamente ya estoy acostumbrada, pero debes en cuando salto a pedirles que bajen el volumen. Eso solo genera que me quieran asesinar por unos segundos. Justo hoy no estaba como para que griten mucho asique hubo varias discusiones acerca de la cantidad de sonido que generábamos.  
Cerca de las 6:40 me levante para darle de comer a la gata. Cuando se empiezan a hacer las 7:00 va directo a donde está su plato y espera muy tranquila a que le de comer. Hoy estaba bastante agitada y no dejaba de gritar. Por lo tanto, esta merienda termino con gritos de mi familia y maullidos de la gata. 

23/05/20
A eso de las 6:00 se podía empezar a escuchar los ruidos de mis familiares saliendo de sus recovecos. Somos de aislarnos en diferentes lugares de la casa después de comer para hacer lo que sea que tengamos que hacer. Personalmente ese tiempo de silencio y tranquilidad me resulta beneficioso para poder concentrarme y estudiar. Hoy la mañana fue muy activa y terminamos comiendo tarde, más o menos a las 3. Por lo tanto, no merendar a las 7 fue un logro.  
Al aparecer en la cocina me cruce con mi mama que me pidió que pusiera a calentar agua. Mientras esperaba al agua también esperaba a que mi hermana volviera de pasear a nuestra perra, Cony. Ya tiene 11 casi 12 años, pero creo que a todas las personas a las que se lo menciono no lo pueden creer, debido a que parece más joven de lo que verdaderamente es.  
El ambiente estaba frio y oscuro. Ya había bajado el sol casi por completo y la estufa estaba apagada. La luz que radiaba la lamparita y la tele prendida, en cualquier canal, iluminaban más que nada la mesa, pero no su alrededor.  
Para cuando mi hermana llego con Cony ya estábamos todos sentados en la mesa. Con el agua caliente y las tazas en la mesa cada uno se puso a preparar su bebida a elección. Yo no dude en hacerme un té con miel y azúcar. Por suerte todavía quedaban galletitas que nos había dado la abuela. La mezcla de té con esas galletitas dulces estaba bárbara.  
Mientras merendábamos nos pusimos al día, o lo máximo que uno puede cuando no sale hace 2 mese. Nos pusimos a hablar de la rivalidad de la gata y de la perra. No se llevan muy bien. A pesar de estar tanto tiempo juntas todavía no confían una en la otra, actúan como si al tocar el mismo piso se fuesen a morir. La realidad es que a Cony no le podría importar más lo que hace la gata, Musa. Talvez tiene algo que ver con que son 2 hembras, en la misma casa, de diferentes especies, que por naturaleza se odian. 

24/05/20
Por alguna razón a mi mama se le antojaron unos alfajores de maicena y a la mañana se puso en campaña para hacerlos. Primero hizo la mezcla, lo metió en la heladera y espero a que pasara el tiempo suficiente como para que se endureciera. Mas cerca de la tarde armó las tapas y las metió al horno. Tardaban unos 8 minutos. Mientras tanto estábamos afuera mirando el atardecer. El cielo estaba de color violeta con las nubes de color rosa. Era una vista espectacular.  
Mi mama se dio cuenta que no teníamos dulce de leche repostero y nos faltaba el coco rallado, y fue a buscar lo que nos faltaba al almacén de la esquina. Como de costumbre puse el agua a calentar para hacer los tés. Sorprendentemente para cuando el agua llego al punto de hervor era un poco antes de las 6:00, lo cual para estos últimos días era bastante temprano.  
Esperando a que mi mama vuelva me di cuenta de que este era seguramente el día más frio de la semana. Estaba ventoso y seco, penetraba la ropa y te morías de frio. También estaba oscuro debido a que el sol ya se había puesto y la única iluminacion provenía de la luz del extractor, lo que causaba que la cocina estuviese muy oscura.  
Se podía ver el vapor que generaba el agua caliente en contraste con el aire más fresco. Estábamos todos sentados con nuestros tés, cafés y el Nesquik de mi hermano. Cuando comí un alfajor sentí que todavía estaba calentito del horno, mirando alrededor me di cuenta de que los demás también lo notaron.  
Fue una merienda de mucha discusión, amigable y chistosa. Discutimos acerca de cuál de todos los Spiderman que hubo era el mejor. Coincidimos en que el primero era el original pero que los mejores eran los últimos dos. Nos reímos bastante por la ridiculez de la conversación. 
Cerca de las 7:00 Musa estaba ya dando vueltas a su plato con anticipación. Me levante de la silla y lleve la tasa a la pileta. Después me dirigí nuevamente a la gata para darle de comer. 

25/05/20
De en día, debido a que mis padres están separados y estamos en cuarentena, no vemos a mi papa muy seguido. Hace unos días dieron permiso para que aquellos que tuviesen a padres separados pudiesen visitarlos. Por lo tanto, hoy cambiamos de lugar físico. Nuestro papá nos invitó a tomar la merienda a su casa.  
Llegamos a las 5:00, preparados para comer unas medialunas. Antes de llegar habíamos pasado por una panadería al lado de casa. Estaban calentitas, bienvenidas en un día tan frio como hoy. 
Como siempre yo tome un té verde con miel. Al poner la miel en la taza podía ver que había algunas miguitas que habían quedado en la miel de días anteriores al comer tostadas, eso era habitual al estar en la casa de mi abuelo, que consumo tanta miel como yo o más.  
Después de tanto tiempo sin vernos estuvo bueno poder hablar en persona y contar cosas que habíamos experimentado en las últimas semanas. Nos divertimos bastante contando anécdotas de la gata, que antes era de mi papa, que está loca. Hablamos de libros que queríamos leer o que ya habíamos leído. También dio vuelta el tema de la familia de mi abuela, de España.  
Hubo una buena parte del tiempo que estuvo ocupada por mi papá ayudando a mi hermana con tareas del colegio. Me hizo acordar a los momentos cuando la vida era normal y no estábamos en una pandemia. También me recordó a mis tiempos en el colegio.  

26/05/20
No hubo merienda. Me quedé dormida y nunca fui a la cocina.  

27/05/20
Estoy entrando en una costumbre de echarme a dormir en algún momento después de comer. No me pregunten porque, porque no sé. La verdad nunca fui de tomar siestas porque me arruinar las ganas de dormir a la noche. Pero hay ciertas cosas que no se pueden evitar. Y esto es exactamente lo que estaba haciendo antes de la merienda, dormir una siesta.  
No es lo ideal porque tenía que ir a dejarle unas cosas a mi abuelo, y para cuando me desperté ya era el momento de tomar el té. A pesar de que podía oler que Martu había cocinado algo, como de costumbre, opte por ir de un raje a lo de mi abuelo a dejarle las cosas que necesitaba.   
Como había calculado, no tarde más de 15 minutos en ir y volver, pero al llegar ya estaban comiendo los panqueques que habían cocinado. Debido a que estaban en el medio de una conversación, me enteré de que en realidad mi hermana había cocinado los panqueques porque le quería pasar una receta exacta a la prima de mi mamá. Me imagino que todos cocinan panqueques poniendo los ingredientes a ojo, si les llegaran a preguntar que utilizaron, seguramente no sabrían las cantidades con exactitud.  
Mi merienda entonces consistió de un té con miel y unos panquequitos con dulce de leche. Para cambiar un poco no prendimos la tele. Los últimos días estuvimos teniendo problemas para hacer una elección acerca de que mirar y es aburrido mirar los títulos sin elegir.  
Además de comer una buena cantidad de panqueques también nos reímos mucho de los chistes típicos de mi familia, esos chistes que son tan personales que si otra persona los escuchara no entendería nada.  

28/05/20
Otra merienda más. Esta merienda fue en lo de mi abuelo, que es donde se está quedando mi papá por el momento. Fuimos después de comer, mis hermanas y yo. La idea era ir para pasar el tiempo y hacer trabajos de la facultad/colegio.  
Al llegar nos pusimos en campaña. Yo hacía trabajos mientras mi hermana más chica tenía unas clases virtuales. Julieta en cambio se sentó en la mesa junto a mí y se distrajo completamente con la televisión que estaba prendida. Creo que todos tenemos esos momentos que no importa cuánto esfuerzo ponemos, simplemente no nos podemos concentrar. 
Cerca de las 5:00 mi papá se puso a cocinar un budín de limón. Cocinar nos calma a todos en mi familia, y mi papá no es diferente. Mientras se cocinaba nos pusimos a hablar de los varios problemas que estamos enfrentando en el mundo. No es un tema que nos guste tocar, particularmente, pero de vez en cuando es necesario. Toda la conversación se llevó a cabo mientras que el budín se cocinaba, el agua se calentaba para el té y la máquina de café dejaba de procesar. 
Finalmente, cuando terminaron las distintas actividades, nos sentamos todos en la mesa para comer y tomar. Fue otro lindo momento en familia, especialmente en estos momentos de distanciamiento social, es importante apreciar esos pocos momentos. 
El budín quedo sin mucho sabor, pero lo comimos igual. A la mitad de la merienda mi abuelo se levantó de la mesa para chequear su mail y Martu también porque tenía organizada una llamada por zoom con una amiga. 
Me había puesto como meta terminar unos trabajos este día, asique mientras los demás hablaban yo escuchaba y hacia mis trabajos. Sorprendentemente los conseguí terminar antes de que nos vayamos lo cual me sorprendió mucho. 

29/05/20
Esta merienda fue una merienda corta pero larga al mismo tiempo. Fue uno de esos momentos en los cuales nos propusimos merendar mirando una película, e hicimos exactamente eso.  
A eso de las 6:00 nos sentamos en la mesa mientras buscábamos una película. Todo esto mientras el agua del te calentaba, obviamente. Terminamos decidiendo por ver Me Before You, una película que todos habíamos visto pero hace mucho tiempo. 
Había sido un día muy frio y ventoso, lo cual era lo normal en estos últimos días. El final de la película nos dejó sintiéndonos de una manera que iba muy acorde con el clima. Mi mama y mi hermana no pudieron evitar llorar.  
Hubo dos opciones de comida, alfajores que había hecho mi mama o panqueques que había hecho mi hermana. Yo termine comiendo unos alfajorcitos, que estaban buenísimos.  
La merienda en si fue corta, pero como la película es larga y nos quisimos quedar para terminarla, no nos levantamos de la mesa hasta casi las 8:00, lo cual implico que seguimos casi directo para la cena. A la mitad me tuve que levantar para darle de comer a Musa que ya estaba impaciente. 

30/05/20
Esta es la última entrada acerca de mis meriendas.  
Fue una merienda distinta. Pero no fue distinta como la primera de las meriendas acá documentadas del 20/05, pero fue bastante parecida en varios sentidos.  
La merienda de hoy fue tardía. Debido a que habíamos almorzado tan tarde, tipo 3:00, no tuvimos ganas de volver a comer antes de las 6:00-7:00. Fue uno de esos días que queríamos estar más solas, mi hermana y yo. Nos sentamos en la mesa y empezamos a hacer distintos trabajos que teníamos que realizar. Yo tenía que leer y resumir, como de costumbre. Pero mi hermana tenía que hacer acuarelas caseras, las cuales se crean al hervir distintas cosas naturales, como hojas, verduras o especias, por determinado tiempo.  
No nos sentamos en la mesa para merendar específicamente. Simplemente nos sentamos cerca de las 5:00 para hacer las tareas y nunca nos fuimos. Queríamos tomar algo mientras estudiábamos, en el momento no nos dimos cuenta del horario, si nos hubiésemos dado cuenta hubiésemos llamado a los demás. Pero no fue así. Por lo tanto, inintencionalmente terminamos merendando sin querer. 
Para distraernos un poco pusimos una serie de fondo. La cual termino siendo bastante interesante. Y sorprendentemente logre terminar de resumir lo que quería resumir en ese determinado tiempo.  
La merienda fue algo que siguió y termino cuando empezamos a comer. Se puede decir que la novela nos intrigo. 
Ya cuando estábamos terminando de tomar nuestros tés y de comer unas galletitas, los demás familiares empezaron a aparecer. Obviamente que se enojaron por no llamarlos para que merienden con nosotras. 


Comments

Popular posts from this blog

Análisis de "En el bosque"

Análisis de "Un lugar limpio y bien iluminado"

Carta a Freddy Mercury