Escena de lectura: algunas ideas iniciales
Vengo de una familia que escucha la radio cuando está en el auto. Ahora con la invención de Spotify eso a veces cambia. Pero cuando era chica no había opción. Se entraba al auto y si o si se encendía la radio.
Recuerdo entrar al autor y que apenas mi papá encendía el auto, la radio prendía. Y siempre estaba Aspen (Y si por alguna razón, lo cual no era muy habitual, estaba en otra estación que no sea esa, instantáneamente se cambiaba).
Seguramente debido al hecho de que escuche tantas veces la transmisión de esa radio termine aprendiendo muchas de esas canciones. Canciones que pasaron a ser canciones que instantáneamente me recuerdan a mi papá. Y a mis hermanos les pasa lo mismo. Una de esas es Hit the road jack. Esto definitivamente cambió mi percepción de la música. Una vez que dejé el colegio empecé a escuchar más las cosas que verdaderamente me gustan y me di cuenta que muchas de las canciones que pasaban en esa radio eran algunas de esas canciones.
La radio ha estado presente en casi todos los aspectos de mi infancia. Calculo que la de muchos otros también. Debe ser por el hecho de que en ese momento todavía no existían las aplicaciones como Spotify que te dejaban elegir las canciones que quisieses, entonces simplemente confiabas en que tu radio favorita pusiese esas canciones que querías escuchar.
Mirándolo desde la actualidad puedo decir que siempre estuvo la radio en los viajes en auto con mi familia. Estuviésemos todos en el auto o solamente algunos.
Un recuerdo que puedo relacionar con la radio es el de las charlas que tenía con mi papá en cualquier momento que estuviéramos solos en el auto. De chica, y supongo que todavía sigo siendo, siempre fui muy curiosa. Era de esas chicas que te preguntaban todo. Yo pensaba que mi papa tenia la respuestas a todos mis interrogantes. Y mi papá es una persona que tuvo la misma convicción que yo, nada más que al ser mayor, él tenía más conocimiento y en muchas de mis preguntas le podía encontrar una manera de responder.
Muchas de las conversaciones con mi papá eran en el auto. Es casi como si directamente no hablásemos en ningún otro lugar que no fuese el auto. Digamos que no es sorprendente, porque soy una persona que si te conoce no deja de hablar, y a mi papá le encanta dar respuesta a mis preguntas, entonces es de esperar que si estamos encerrados en un auto por cierta cantidad de tiempo, no vamos a dejar de hablar.
En la actualidad no paso mucho tiempo en el auto con mi papa. Hace unos años mis papás se separaron, y mis hermanos y yo nos fuimos a vivir con mi mamá, entonces no nos veíamos mucho. A medida que uno va creciendo ya no depende de los demás para que te lleven a lugares. Y por el momento está viviendo en España.
Recuerdo entrar al auto, ponerme el cinturón, minutos después mi papá preguntaba si teníamos puesto el cinturón y si faltaba alguien y prendía el auto, haciendo que se prendiera la radio, Aspen 102.3. Sin falta. Ese era el orden del ingreso al auto de mi papa.
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